28 marzo 2009

AGUA

Cuento corto de un alumno de Periodismo y Comunicación

El 30 de diciembre del año 2074 la humanidad estuvo a punto de desaparecer, la puja por las últimas reservas de agua potable en la Antártida fueron centro de atroces batallas. Ya no se hablaba de continentes, el planeta estaba dividido en tres grandes naciones, todas con ideologías políticas bien diferenciadas, mientras que Alaska y el antes conocido como continente Oceánico, tras largos años de negociaciones, se convirtieron en reservas ecológicas y en los únicos lugares naturales y habitables por las especies animales.

América en su totalidad era por ese entonces “The Coca Cola United States Of America” y estaba presidida por Harry Potter, un actor que solía llamarse Thomas Radcliffe, hijo del reconocido Daniel Radcliffe, que tras el éxito de la trigésimo sexta película de la saga del joven mago, decidió cambiar su nombre verdadero por el de su personaje, el cual interpretara en las primeras entregas su padre. En el sur de la nación se encontraba el Estado “General Motors Little Argentina”, lugar dónde algunos grupos disidentes conservaban el idioma español y viejas tradiciones que consideraban propias, a pesar de los continuos intentos del viejo gobernador Michael Menem por erradicar estos sectores opositores que amenazaban la ideología capitalista. Michael fue el fruto del affaire de Carlos Menem y Monica Lewinsky, mujer con la cual mantuvo relaciones en forma paralela mientras estuvo casado con Cecilia Bolocco.

La renovada Unión Soviética representaba la extrema izquierda. Estaba liderada desde la ex República Socialista Rusa por el comandante del ejército bielorruso Vladimir Lenin e imperaba en toda Europa. Conquistaron incluso hasta la isla “JP Morgan Reino Unido” en el año 2054, territorio antes perteneciente a “The Coca Cola United States of America”. Ese año representó la última vez que se utilizaron ataques nucleares entre ambas naciones, ya que los efectos de los continuos bombardeos provocaron desastres naturales, hasta el punto que se produjo un movimiento de las placas tectónicas de tal magnitud, que el pliegue de las plataformas hizo desaparecer el continente africano.

La potencia restante era la “Ying Yang”, nación bajo la cual se alineaban los países asiáticos, quiénes se asociaron en el año 2037 tras el alarmante crecimiento y la amenaza continua que representaban tanto los capitalistas, como los “zurditos” sobrenombre por el cual se referían a los soviéticos. Era un estado que se consideraba a sí mismo como neutral debido a la cercanía geográfica que tenía con uno y a las relaciones comerciales que mantenía con el otro. Su líder era el emperador Mao Yin.

Sin embargo, en este contexto caótico del planeta tierra, las naciones nunca fueron capaces de generar políticas de desarrollo comunes en pos de la continuidad de la especie. Las diferencias ideológicas, la polución, el invierno nuclear y la utilización de armas químicas, de alcances todavía desconocidos, atentaban contra cualquier intento de unidad. Tras la contaminación de los mares y ríos, la Antártida era el bien más preciado sobre el planeta y por ende, objeto codiciado por todos.

El asesinato en la “General Motors Little Argentina” de Michael Menem (mano derecha e íntimo amigo de Harry Potter) el 28 de diciembre de 2076 y de Stanislav Lenin (sobrino del comandante Vladimir Lenin) el 29 del mismo mes en Moscú puso en jaque a la humanidad, ya que ambos asesinatos se produjeron con armas láser de origen asiático, razón por la cual, se suspendieron todo tipo de relación comercial, diplomática o política entre todos.

Lo que ningún estado contempló fue la inestabilidad del calentamiento global, el cual provocó el 31 de diciembre de 2076 la ruptura progresiva y masiva de los hielos antárticos, hecho que motivó a las potencias a dejar los egos, ambiciones y egoísmos de lado en búsqueda de soluciones y en medidas ambientales conjuntas para tratar de revertir lo que parece a esta altura ya irreversible….

RAMIRO LUNA.-

la Antártida